Retales.

Vuelvo a recordar lo que anotó en su diario Hebbel («Vivir significa siempre ser partidario») cuando Radio 3 cierra la noticia sobre la reducción de la jornada laboral con la canción Van a por nosotros, de La Habitación Roja.

"He leído en el semanal
Que el hombre que nos roba el tiempo
De joven lo pasó fatal
Y ahora es dueño de un imperio
¿Crees que le puede importar si estamos vivos o muertos?
Que nuestra vida no es de cuento".

Unos compañeros de Bellavista me piden una charla para el jueves 13, que me coincide con la presentación del nuevo libro de Juan Clemente. Es por lo que conozco del proyecto de Sevilla Activa (Diputación) sobre lo que de toda la vida hemos llamado Cortijo de Cuarto, ahora pretendido como Barrio de Quarto. Minuto y resultado sobre el tema: De antemano se desconfía, como en todo lo que tiene que ver con las cosas del negocio inmobiliario, la parafernalia de la colaboración público-privada, el emprendimiento, las áreas de oportunidad y el diseño digital de los futuros pluscuamperfectos. Dicho esto, uno: hace falta vivienda protegida; y dos: lo verde no se toca. Pero nunca abandonar el agonismo.

Leo a Pierre Conesa, en la edición de enero de Le Monde Diplomatique, sobre los veteranos de guerra de los USA. Una barbaridad insoportable, aviso a navegantes y trumposos:

En la década del 2000, por cada soldado caído en combate diez veteranos se suicidaron. E1 27 de marzo de 2014, se plantaron 1892 banderas estadounidenses en el Mall, en Washington, en homenaje a los 1892 veteranos que se habian dado muerte desde el 1 de enero de ese mismo año, es decir, 22 al día de media. Actualmente, la tasa de suicidio entre esos soldados continúa siendo dos veces superior a la del conjunto de la población. Sin duda, 1os trastornos de estrés postraumático de los soldados merecerían algo mejor que las fantasías hollywoodenses de «héroes» que nunca conocieron la guerra.

2024 fue el año en que descubrí a Federico Mompou y este 2025 me creo que va a ser mi Año Khachaturian. Por lo pronto, he encontrado la melodía que una vez escuché y se quedó ahí, inolvidable pero innombrable, en busca de autor. Hasta hoy: Adagio del ballet ‘Spartacus y Phrygia’.

Hoy hemos estado con madres del colegio San Ignacio de Loyola, donde hay casi 40 alumnas y alumnos con necesidades educativas específicas. Se trata de un centro público ejemplar en atención a la diversidad, pero la Junta lo quiere desmantelar.

Manolo Lay (@manololay.bsky.social) 2025-02-06T15:12:25.123Z

La película se titula Magyarázat mindenre, que significa algo así como «Una explicación para todo», según la traducción del húngaro al inglés. A nuestro país ha llegado como ‘El caso Abel Trem‘ y, al igual que ‘La profesora de literatura’, lleva puesta la esquizofrenia que sufre la comunidad docente bajo la tiranía del gobierno neofascista de Viktor Orbán. Me ha gustado mucho la actriz Rebeka Hatházi y, sobre todo, las pequeñas piezas corales de su breve banda sonora.