Se utiliza mucho una frase conocida de Buenaventura Durruti sobre la burguesía y el fascismo, sobre todo en días como estos, a 51 años del golpe fascista liderado por Augusto Pinochet y respaldado por EEUU, que supuso una dictadura de casi 20 años y más de 40.000 personas torturadas, desaparecidas o asesinadas. Esa frase, certera y palpable en 1937 y hoy, está dicha en el contexto de una entrevista donde Durruti no deja republicanía con cabeza, ni dentro ni fuera de la República española. Ahí ya no me interpela, no obstante el respeto a un héroe revolucionario que, además, dio nombre a una de las bandas de postpuk más maravillosas de la historia de la música popular británica.
«Los mismos en Chile que en España» escribió Alberti, certero y palpable en 1973 y hoy. La Operación Siglo XX organizado por la guerrillera comunista Tamara pudo haber cambiado la historia de todo un país, pero el espionaje y la traición la dejaron a un solo paso de la revolución. Aquel matar a Pinochet era un acto de amor, pero en 2024 Elon Musk pone el uniforme soviético a Harris en X, líderes de la izquierda anuncian migración a otras redes y Nick Cave dice que es ateo para los creyentes y creyente para los ateos. El neofascismo conjuga en presente simple y el resto no acierta/acertamos con el condicional subjuntivo.