No se puede parar, porque si te paras, pierdes. El domingo fueron las elecciones, y toca hacer balance; pero hoy han salido los datos del desempleo, y cualquier análisis que hagamos tiene que pasar por dar respuestas útiles y efectivas las personas que siguen sufriendo la crisis.
En ese análisis de los datos de desempleo del pasado mes de noviembre en nuestra provincia, hay que extraer fundamentalmente tres ideas:
– La primera, que aunque ha descendido un poco el número de paradas y parados, continúa la tendencia a la baja de los contratos indefinidos.
– La segunda, que el escaso empleo que se crea sigue siendo temporal y precario, en esta ocasión, propiciado por la cercanía de las fechas navideñas, en las que se contrata en el sector servicios, pero son contratos de escasa duración. Por tanto, no se está creando empleo de calidad ni estable, la inestabilidad que sufren las y los trabajadores, sigue siendo la lamentable tendencia.
– Y la tercera, que sólo el 5% de los contratos firmados son indefinidos, una situación que tenemos que revertir; pero además tenemos que recordar que hay 66.942 sevillanas y sevillanos sin trabajo remunerado ni prestación alguna. Estamos hablando del 34,89 % de personas desempleadas en nuestra provincia que no reciben ninguna ayuda, un muy elevado número de familias que viven en situación precaria, a las que no se está poniendo remedio.
Conclusión: no podemos creer a quienes digan que estamos saliendo de la crisis, ya que si comparamos la cifra de desempleo de la provincia con datos anteriores a la crisis, el paro está un 34,80% por encima de enero de 2008 con 66.760 personas más en paro, personas a las que no se les está dando respuesta, a las que no se les ofrece un empleo digno y con calidad, familias que pasan por situaciones desesperadas mientras las administraciones no hacen nada por solventarlo.
Mientras el neofascismo irrumpía, yo estaba viendo «Mundo obrero», la imprescindible obra de Alberto San Juan y @teatrobarrio. Ahora no dejo de repetirme el estribillo de la obra: «La pregunta no es qué va a pasar, sino qué vamos a hacer». Pues eso. ¿Qué vamos a hacer?
— Isaac Rosa (@_isaacrosa) 2 de diciembre de 2018
Y esto, se vote a quien se vote, es nuestra obligación denunciarlo, revertirlo, solucionarlo. Con las fuerzas de los votos, con las fuerzas de la movilización.