Por la mañana, encuentro en Pedera con representantes de IU en los municipios de la zona para analizar la situación de la sanidad pública. Una lucha que, dicen, no tiene color político, pero es política. En los pueblos del área, donde tiene que haber 41 médicos, hay 15. En Marinaleda no saben qué es un/a pediatra desde hace 3 años.
El deterioro del sistema público de salud en Andalucía fue el talón de aquiles del gobierno de Susana Díaz. Los presupuestos del gobierno actual de Juanma Moreno profundizan en esa precariedad, al mismo tiempo que se incrementan los recursos que se transfieren a la privada. Las encuestas dicen que la atención primaria y hospitalaria es la mayor preocupación de la ciudadanía andaluza, pero esa preocupación no afecta electoralmente al PP. El papel de Izquierda Unida, con Susana Díaz y ahora, sigue siendo el impulso de la sociedad civil en nuestros pueblos y ciudades, fomentar la creación y el empoderamiento de mareas y plataformas, y unirse a todas las convocatorias que se realicen en estos espacios sociales.
Por la tarde, también allí, en la estación, esperamos la llegada del media distancia que viene de Málaga con activistas de la Plataforma por un Tren Público, Social y Sostenible, con quienes participamos en una concentración reivindicativa junto a Toni Valero, Enrique Santiago y Ernesto Alba.
Como es habitual, bastantes vecinas y vecinos de Pedrera acudieron a esta movilización, que acabó casi a la hora del que llaman «el tren de los estudiantes».
Y como siempre, gracias a la alcaldesa, Lucía Ruiz, a Ana Aranda, Dolores, Pedro Ramón… por el cariño y el compromiso que dejan en todo lo que hacen. En Pedrera como en casa.