Tal día como hoy, en 1937, ingresó el primer preso en el campo de concentración de regeneración por el trabajo de Los Remedios (Sevilla). Según un estudio que realizaron en 2021 José Luis Gutiérrez Molina e Irene Correa, fue el jornalero cazallero Francisco López González, «cuya personalidad confirma que el campo no sólo se usó sólo para mendigos y gentes de la ‘mala vida’ sino también para perseguidos políticos y sindicales».

Dice nuestro querido historiador José María García Márquez que la ubicación exacta de este campo de concentración sigue sin estar clara pero, por la cartografía de la época, podría situarse en lo que hoy sería la calle Virgen de Fátima, que va desde Prosperidad a República Argentina. Para Victoria Fernández Luceño, este centro ocupaba «los terrenos baldíos de la ciudad de Sevilla que se extendían entonces desde el fondo de Triana al Charco de la Pava».

Sea como fuere, «López González vivía en Sevilla y habia participado en Ia resistencia a los golpistas por las calles San Luis y La Resolana. En enero de 1937 fue detenido e internado en la Prisión Provincial. Poco más de dos meses despues Correa compareció ante un consejo de guerra que le condeno a muerte. Una pena que le fue conmutada por la de 30 años. Entonces, el 10 de junio, fue enviado al Campo de Los Remedios. ¿Para trabajar? Es posible. Sin embargo, a mediados de septiembre reingresó en la prisión por orden del consejo de guerra. Fue de nuevo juzgado en agosto de 1938 y vuelto a condenar a la pena capital que, nuevamente, le fue conmutada por la de 30 años. No terminarian aqui sus vicisitudes con el mundo del trabajo esclavo. En marzo de I943 fue trasladado a las obras del Canal de los Presos e internado en el campo de Los Merinales en Dos Hermanas».

PD: Esto lo escribo gracias a Manuel Tamajón, que fue quien me regaló el estudio El campo de concentración de regeneración por el trabajo de Los Remedios.