De antemano, no se me ocurre nada si me preguntan ¿Qué recuerdas de 1995? Luego, si busco en la red, encuentro que ETA asesinó a Gregorio Ordóñez (eso sí lo recuerdo), en Israel mataron a Isaac Rabin (también), se casó la infanta Elena con Marichalar (eso… jaja) y se celebraron elecciones municipales y autonómicas en España, con la victoria del Partido Popular. Y más: que terminó la terrible guerra de Bosnia, tuvo lugar el atentado en el metro de Tokio con gas sarín; se lanzó Windows 95, se estrenaron películas como Toy Story y Pulp Fiction, y Gangsta’s Paradise de Coolio sonó en Mentes peligrosas (quizá la última que vi de Michelle Pfeiffer).
El primer día de julio del 95 del siglo pasado fue sábado y en la portada de El país (110 pesetas) se hablaba de una leve remodelación del gobierno de Felipe González, en crisis, a las puertas del semestre de la presidencia española de la Unión Europea. El insoportable Boris Yeltsin también cambiaba de ministros e Indurain aparecía lleno de cables en una foto donde se anunciaba su conquista del 5º Tour de Francia.
Más o menos por esa fecha ubico mi historia particular como un periodo anodino y con problemas sentimentales.
Hace un par de meses, en una estantería del histórico despacho de finanzas en la sede del PCE de Dos Hermanas, encontré un cartel de la Asociación de Vecinos Dr. Fleming (que englobaba a las barriadas obreras del Amparo, Venta Bermeja y Sta. Mónica) donde se anunciaban «actos culturales para celebrar el día 1 de julio de 1995». Entre ellos, la inauguración del campo de fútbol por parte del alcalde Toscano y el posterior homenaje «al que fue primer alcalde democrático de nuestra ciudad D. Manuel Benítez Rufo». El cartel mostraba la foto de nuestro camarada y no del alcalde en curso, cosa que tiene su miga (y tuvo su explicación, supongo) y que hoy, sin pesetas y bajo el imperio de las redes sociales, sería impensable. (No en vano, alguien del gobierno municipal amenazó recientemente con retirar apoyo insititucional a cierto evento si en el cartel anunciador aparecía el logo de IU, muy-pequeñito-muy-pequeñito, junto a muchos otros).