«Cuentan que en la época posterior a los encarcelamientos masivos de finales del 34 en Asturies, fruto de la brutal represión que las tropas de Franco llevaron a cabo contra la población civil en los meses posteriores a la revolución antifascista de octubre del 34, un preso garabateó la versión inicial del poema del que parte la letra de esta canción en un papel con un carboncillo, lo arrugó y lo lanzó desde el patio de la cárcel de Uviéu hasta el exterior, donde alguien lo recogió y se fue difundiendo a partir de entonces en diferentes formatos, recitados y cantados».
«Esta versión, actualizada, huyendo de la nostalgia pero con la necesaria consciencia de los tiempos pasados y su analogía con los que vivimos ahora, pretende ser mi grano de arena a un género tan presente en el cancionero popular como es el carcelario, ese que da fe de la necesidad del ser humano de cantar cuando se encuentra en situaciones extremas como puede ser la de privación de la libertad».
«Valga también como humilde homenaje a todas aquellas personas que en todo el mundo, pero desde luego también sin salirnos de los límites del estado español, sufren represión y persecución judicial por querer expresar sus ideas libremente como activistas, políticos o artistas. No nos callaremos».
Nacho Vegas (lo he leído en muchos sitios, por ejemplo en El Diario Montañés, pero no he encontrado el original).
Según la Wikipedia, un osciloscopio es «un instrumento de visualización electrónico para la representación gráfica de señales eléctricas que pueden variar en el tiempo». El video del islandés Olafur Arnalds para la canción … o lengra está grabado desde el tubo de rayos catódicos de un osciloscopio de 50 años, donde se coreografían 512 puntos de luz para moverse alrededor de la pantalla, al estilo de un «cuerpo de ballet».
Diego Lorenzini, músico y dibujante chileno, graba para Uva Robot, un lugar de «canciones raras hechas por gente común», donde te puedes descargar su disco ‘De Algo Hay Que Morir’ «en la calidad que quieras absolutamente GRATIS (o pagando el precio que tu creas conveniente) apretando el link BUY NOW (name your price). Que tengas un buen día».
En el perfil de Spotify de los belgas TaxiWars pone: «Siéntelo. El cuero sintético pegajoso del asiento trasero. Huélelo. Un olor a alcohol, mezclado con la colonia del conductor».
Tom Barman adora los viajes en taxi. «Es como viajar dentro de casa», dice. «Suena como una definición de jazz, si es que alguna vez hubo una».
«Y TaxiWars es jazz».
P.D: Cada vez que escucho una canción nueva que me gusta, rastreo por internet sobre ella, busco si tiene algún vídeo, indago sobre quién/es la han compuesto (si es/son desconocidos/as para mí) y veo si forma parte de alguna colección, álbum… Luego, si pasa el «filtro de interés», la guardo en una lista de Spotify que he llamado Cajón Desastre.