En la radio dicen que con nuestros actos tenemos que abandonar el qué dirán y buscar nuestra propia aprobación (sin caer en el absurdo, claro) para evitar convertirnos en seres acomplejados. Creo que esa prueba la he superado estas vacaciones.
Leo en Libération sobre una voz fascinante:
El inédito registro romántico-trágico de las composiciones de su primer EP Le monde s’est dédoublé se explica (en parte) por un drama familiar. Su madre, la psicoanalista y filósofa Anne Dufourmantelle, murió de un ataque al corazón en el verano de 2017 mientras trataba de salvar a dos niños de ahogarse en una playa de Ramatuelle.
Haciendo malabares entre francés, inglés y español, Clara Ysé explora un territorio desconocido, literalmente bombardeándonos con sus conmovedoras canciones habitadas por una poesía de la realidad.