Dolor de muelas del corazón.

Por fin acuerdo en Sumar. Ahora toca menos Zarzamora y más Tour para las Masas, remedar al grupo favorito de IDA que tocó anoche en el Primavera Sound, donde las divinas Julia Holter y Caroline Polachek me concilian con la música moderna de los USA. Los macrofestivales (y a veces los registros de coaliciones) devienen inhumanos y ecocidas, aparte la sensación de ir corriendo como pollos sin cabezas por túneles, pasillos y escaleras de Atocha para llegar tarde a ninguna parte.

Al gimnasio en coche para montar en una bici estática.

79 años de la publicación de 1984, pero desayuno con una cita de Gramsci: «La historia enseña pero no tiene alumnos» y cuánto agradezco la disciplina de nuestra gente a la hora de evitar el ruido y las nueces en el culebrón mediático de Sumar. Hablar demasiado ayuda a tu enemigo, que decía un cartel soviético de la era Stalin (círculo cerrado, Orwell).