Día de la Radio,
me recuerdo con 14 años escuchándola en el instituto, hago recuento del historial de aparatos, desde aquel enorme Philips que mi padre colocó sobre una repisa en la salita de estar hasta la app del móvil y los auriculares bluetooth; transistores, radiocasetes, pecés y ese equipo hifi que hoy duerme en un altillo del dormitorio. De siempre las públicas (RNE, antes Radio 1; Radio Clásica, antes Radio 2; Radio 3, desde que nació; Radio 5, menos), incluso cuando (a pesar de) las tertulias matinales eran corrillo de ultras. Miles de kilómetros y horas sin/en soledad, miles de canciones que sonaron una primera vez y ya nunca más se fueron, incluso miles de palabras que he escrito y escribo aún/ahora. Somos, en buena parte, lo que escuchamos, cada cual llevamos dentro nuestro podcast único e irrepetible.