Nada muere esta noche, sólo se desvanece, como todas las noches. Nadie resucita mañana, sólo será amanecer, como cada día. Es cierto que la historia de la humanidad es hermosa; lástima que la del ser humano sea tan triste.
Letra: Simone de Beauvoir, La edad de la discreción.
Música: Marino Formenti, Night Studies.