Bárbaros de élite
Fuentes de Andalucía ya sorprende a paso ligero pero, cuando curioseas un poco, invita a detenerse en los detalles, a dejar la prisa en el desvío de entrada por la autovía. Es lo que estaba pensando por la mañana cuando la radio suelta el portazo de la inflación: la electricidad, los carburantes y las hortalizas, tres básicos del día a día, riéndose de la ridícula subida de las pensiones y de la igualmente ridícula propuesta de subida de los salarios propuesta por la patronal.
El mantra empresarial ya es conocido: si todo va sobre (sus) ruedas, hay que moderar los salarios para que la economía siga creciendo; si las cosas van mal dadas, hay que moderar los salarios para que la economía crezca. The winner takes it all, esa doctrina camarote que vale para liberales como Esperanza Aguirre y Aznar y para la que ahora llaman liberal progresista en Ciudadanos, vaya, la pólvora de toda la vida, la diferencia entre los Bárbaros de élite y los Bárbaros de toda la vida de Clash Royale.