Jueves por la mañana en los juzgados, apoyando a 20 sindicalistas del SAT en el juicio por aquella acción sorpresa que realizaron en un Mercadona hace 7 años.
En la radio, un analista del BBVA afirma que la política es un riesgo para la economía. Supongo que se refiere a las ranas de Aguirre y a la cafetería de Cifuentes, no a los carritos de comida que se llevaron jornaleras y jornaleros del SAT para entregárselos a familias de la Corrala Utopía.
Alguna analogía hay entre ambos casos. Los dos pasan por el juzgado y los dos tienen un carácter simbólico: la cara (dura) y la cruz (pesada) de una misma moneda. Pero uno ha puesto la política al servicio de la (determinada) economía, y viceversa; y el otro, por contra, refleja las consecuencias.
En realidad, lo mismo que plantea el asesor del BBVA: «es el capitalismo, estúpido».