Hoy me he vestido de domingo, la ropa de siempre bien planchada para celebrarme. Ha debido intuirlo el perro de la calle San Alberto, no ha ladrado a mi paso por delante de su puerta. Que me respete la salud: dinero no tengo[…]
La frase más titulada del día pertenece al Negro Fontanarrosa: Nunca me importó qué hiciste con tu vida, gracias por lo que hiciste con la mía. Aire de tango. Como no soy futbolero, mi dios nació en Turingia, queda más snob y evita[…]
Hay días del montón y días de rachas grises. Para su audición, mi hijo interpreta un vals de Grieg con aires gimnopédicos, camisa blanca de domingo y jersey azul de pico, portada de The Housemartins.
Todos los días laborables, más o menos a la hora del desayuno, la sirena de una ambulancia atravesando El Arenal: el día de la marmota. Una procrastinación con vistas a archive.org (gracias, Eu). Madrigales para trabajar (Monteverdi, Verdelot). Largo paseo para calentar mis[…]
Primer día de vacaciones en casa (pero de guardia). Intento desayunar leyendo la prensa digital. En ocasiones, imposible: las webs de algunos diarios son paquetes de galletas, ya no queda espacio en la pantalla para leer, seis pulgadas sometidas al eufemismo mercantilista («mejorar[…]
Si quieres darte el placer de desvelar un secreto y que nadie lo descubra, cuéntalo en un libro. Algo así le he leído a Antonio Luque (Sr. Chinarro), no sé si en una entrevista o en su blog. A pesar de la saturación[…]
Las 19,50 h. en Tokio, según Jazz Sakura Radio, que acompaña con sonidos suaves, de madrugada. Mi jornada laboral de domingo a viernes en confinamiento tiene un deje de maratón para amateurs, puedes parar para ir a la cocina, rallar zanahoria con manzana,[…]
Compro esta afirmación del youtuber Fernanfloo jugando a Hello neighbor: «Si una casa tiene biblioteca es que hay fantasmas».