La coherencia solo se busca cuando algo falla

https://youtu.be/ru-F6yeVR_o La frase la encontré en un artículo sobre Gorillaz, y da qué pensar, ¿verdad? Esta semana he empezado a sentir que algo despegaba, tal vez los tres días de visitas al Parlamento, el frío y la lluvia y sentarse cuando hace sol en la plazoleta donde el colegio de Fran Martínez (que hoy cumple cuarenta años), mientras espero a que mi hijo acabe su clase de piano. La coherencia parece sobrevenida en la playlist que te prepara el azar binario de Spotify. Si yo fuera cantautor, me gustaría ser el hombre que borra el espacio entre él, su música…

Un regalo

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Hoy me he vestido de domingo, la ropa de siempre bien planchada para celebrarme. Ha debido intuirlo el perro de la calle San Alberto, no ha ladrado a mi paso por delante de su puerta. Que me respete la salud: dinero no tengo y amor siento a raudales, aunque lo esconda mi timidez. El dolor de no recibir felicitaciones de Carlos por primera vez, la complicidad de volver a recibir el ‘Ánimo valiente’, los mensajes de personas en las redes sociales, esa sensación de que alguien se acuerda de ti en algún momento del día y te dedica unas palabras en un mundo donde los gestos amables son un privilegio. Que la felicidad es la felicidad de la gente a la que quieres. Que todo lo vivido sea útil para lo que me queda por vivir, que me haga mejor. Gracias.