Nadie sin su papel.
Fin de semana de asambleas en La Campana (viernes), El Viso del Alcor (sábado) y Huévar (domingo). Entre medias, videoconferencias on the road, ratos de música y escapada al cine. De lo uno: tanto escuchar a Kortez ha dislocado los algoritmos de la app de música por streaming que me recomienda novedades. De lo otro: el retrato del lumpen finlandés en Kaurismaki es un alegato de la dignidad del proletariado. Fallen leaves está en pocos cines, pero se proyecta en infinidad de hogares; su sentido del humor quema igual que la escarcha: los ambientes sórdidos atraen, las conversaciones son cortas pero dicen largo, los rostros hieráticos de los personajes seducen, lo secundario interpela y reclama la atención (un cartel de ‘Prohibido fumar’, la comparación de una película de zombis con Banda aparte de Godard, la pareja caminando al final…).