Por algún disloque mental piensas en manos frías cuando vas a buscar el regalo de tu amiga invisible, igual que pones a Henry Mancini para las tareas domésticas o tu duermevela se despacha con una canción de Silvio Rodríguez («iba matando canallas con[…]
De regreso a Marismillas, esta vez en campaña para las elecciones generales (obviedad). Aquí me pasa como en Pedrera: me convierto en su embajador antes y después de ir, a todo el mundo se lo cuento. (Lo mejor de todo es que no[…]
Durante treinta años viví en un piso bajo de un edificio de cuatro plantas, por mi ventana pasaba la gente y nunca sabías si se miraba en el cristal o husmeaba por el interior. Ahora, en las noches de ventanas abiertas, desde la[…]