Doy la bienvenida a mi nuevo año (ya van 57) y despido a nuestro compañero Juan G. Cotán, con quien compartí tantas movilizaciones laborales y tanto compromiso político. Edades otoñales (me encanta el otoño, más ahora que el cambio climático nos lo niega),[…]
Es tiempo de feminismo radical, de combatir el silencio y la indiferencia, del cordón sanitario al negacionista, a la ambigua condescendencia en el lenguaje, a las bromas de hombre blanco. Celebramos cada 25N como símbolo de un fracaso del sistema.