Hoy se ha celebrado pleno en el ayuntamiento de Badolatosa, donde se ha aprobado, con matices, una moción presentada por nuestro grupo municipal a raíz de la agresión física (puñetazos y patadas) sufrida por nuestro portavoz, Miguel Ángel Mendoza, mientras repartía un boletín informativo puerta a puerta por las calles del pueblo. El salvaje en cuestión, padre de una concejala del gobierno local (PSOE), fue denunciado a la policía tras recibir asistencia médica. Afortunadamente, la cosa no ha ido a mayores y, según me han contado Maxi (coordinador local de IU Badolatosa), el pleno ha transcurrido con cierta normalidad (allí la normalidad es que algún concejal socialista -sic- nos acuse de comunistas bolivarianos y esas lindezas, pero vaya).
Ante esta situación, José Antonio Mesa y yo hemos querido asistir expresamente a esta asamblea para mostrar el apoyo de la dirección provincial de IU Sevilla a nuestra militancia y, muy en particular, a nuestro grupo municipal (que, por cierto, allí no ganamos las elecciones por tres o cuatro decenas de votos) y a Miguel Ángel, claro. Un apoyo que haremos explícito extendiendo lo sucedido para que, al menos, se tome conciencia de que la libertad de expresión (en este caso: repartir un boletín informativo que critica la actuación del gobierno municipal) es una conquista de la democracia que solo puede ser contrarrestada por medios pacíficos.
Porque, efectivamente, la crítica que se hace, si se considera que falta a la verdad, puede ser denunciada como, por ejemplo, ha denunciado el compañero José María Calado a un periodista de ABC (y subsidiariamente, a este diario) por injurias y calumnias, tras la publicación de un artículo que acusaba de prevaricación a nuestro concejal de Cultura (entre otras responsabilidades) en el ayuntamiento de Espartinas.
