Este viernes nos hemos reunido con la presidenta y el secretario de Facua Sevilla, Rocío Algeciras y Jordi Castilla (a quien ya conozco de coincidencias en Marea Blanca… y de una actuación rockera suya en una obra de teatro). El encuentro ha sido muy instructivo para mí (en modo curso acelerado) y ha servido para empezar a coordinar, cada cual desde su ámbito y con su autonomía, determinadas actuaciones que pudieran ser útiles en las pequeñas cosas, en lo que quizás no ocupa titulares.
Cosas cotidianas que afectan a la clase trabajadora, fruto de un sistema depredador donde bancos, compañías energéticas y de telecomunicaciones pintan el BOE de privilegios: ejecuciones hipotecarias, recibos de la luz, tarjetas revolving, préstamos personales, créditos a consumo, gastos bancarios, registros de impagados… todos burlando las leyes, muchos de ellos con tirones de oreja por parte de la Unión Europea a nuestro Estado por falta de regulación y garantías.
Además, hemos tratado con FACUA temas que llevaremos al Parlamento y a la Diputación de Sevilla y que afectan, en este último caso, a los municipios menores de 20.000 habitantes, donde las políticas de consumo llevan años sin presupuesto.
