Un ingreso mínimo vital para que nadie se quede atrás

Cuestión de semanas. El Gobierno de coalición ha acordado poner en marcha para mayo el ingreso mínimo vital que en estos duros momentos es imprescindible para cubrir las necesidades básicas de los hogares más vulnerables. De esta forma, el Estado cumple con su responsabilidad para que de esta salgamos juntos y juntas, sin dejar a nadie atrás.

Durante estas últimas semanas, el Gobierno de coalición ha lanzado medidas para ayudar a las pymes, a trabajadores/as y autónomos/as; pero no todas las personas pueden beneficiarse de la prestación por desempleo o de las condiciones de un ERTE, por lo que es necesario que el escudo social proteja a aquellos y aquellas que se quedaron fuera de las primeras medidas. Un Estado que no deja desasistido/a a nadie tiene la obligación de extender la mano a las familias que se encuentran en situación de vulnerabilidad económica.

Hay familias que a día de hoy tienen dificultades para abastecerse, lo cual se multiplica con las medidas de confinamiento y de reducción de trabajo no esencial. 960.000 hogares en España viven en esta situación de vulnerabilidad.

El coronavirus no solo ha supuesto un choque en la salud pública sino en la economía nacional e internacional. También ha puesto de manifiesto la necesidad urgente de un Ingreso Mínimo Vital que, además, afecta positivamente al conjunto de la economía, pues es necesario mantener cierta capacidad de consumo en la ciudadanía para continuar estimulando la economía una vez terminado el confinamiento estricto.

Demostramos que “no dejar a nadie atrás” es más que un eslogan; es una línea de acción política que el Gobierno de coalición seguirá hasta que sea una realidad para toda la ciudadanía. El Ingreso Mínimo Vital es un paso más en la dirección correcta hacia la justicia social.

No vamos a permitir que las familias que están sufriendo el golpe más duro de esta emergencia lo sigan haciendo. El Ingreso Mínimo Vital ya es una realidad.

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