Hay un hombre en España

que lo hace todo. Hoy se llama Koldo, Dani, es novio de Ayuso y es Rubiales, y va de romero en un caballo de José Manuel Soto. No necesita escaño en ningún parlamento, ni redactar el BOE, piensa que la democracia es cosa de desarrapados, el precio de todo y el valor de nada, una suerte de beneficencia que fastidia lo suyo ma non troppo. A fin de cuentas, para él España solo es un país, unas gitanillas en un arriate de un balcón de la torre de Babel donde únicamente él habla un mismo idioma. Y también hay una…