Mañanita de niebla. En su 73 cumpleaños, mi jefe de cuando estuve en AVRA, el grandísimo Fernando Herrera, nos saluda con el lema «Mantengamos él pánico, no es momento para la calma!!!», dice que es un tuit de la Ser. Aquel maravilloso equipo humano seguimos manteniendo el contacto vía grupo de WhatsApp, algunos también nos vemos de vez en cuando.
David Grossman, escritor: «Es inevitable sentir dolor cuando uno escribe». Más de cinco mil quinientos vecinos y vecinas de Dos Hermanas han tenido o tienen Covid-19, lo que supone ya el 4% de una población que supera los 135.000 habitantes. En nuestro pueblo tenemos que lamentar la pérdida de 69 vidas humanas desde el inicio de la pandemia, que en esta tercera ola está resultando especialmente virulenta: hoy nos ponemos por encima de mil casos en la tasa PDIA de los últimos 14 días. Las nuevas cepas del virus no entienden de brexit ni de espacios abiertos, dicen que se propagan con más facilidad al aire libre. Los culillos desperdiciados, los retrasos de las farmacéuticas y sus contratos opacos con la Unión Europea, los fiestorros a puerta cerrada y los enchufados para vacunarse hacen el resto de este panorama del desaliento.
