Somos viajeros.

Las macetas de Ayuso, la Extremadura andaluza de Feijóo, la lideresa de Ciudadanos repitiendo una y otra vez «plesbicito», y yo pensando en la cita que acabo de escuchar en la radio: «Solo hay algo más fuerte que el miedo: el absurdo».

Google me recuerda que hace 7 años participé en la inauguración de la Plaza Marcelino Camacho, en Mairena del Alcor, gobernada entonces (y ahora reelegido) por el mismo alcalde plesbicitado del PP que, años más tarde, también rotuló un parque con el nombre de nuestro camarada Isidoro Núñez, regidor comunista del municipio en los primeros años de la democracia. (En ambos casos, fueron propuestas de nuestra gente). Lo comento aquí por esa nostalgia efímera, pero intensa, que me ha dejado Viajeros, una de las canciones desconocidas más hermosas de la última década, con la que tanto me identifico cuando pienso en los kilómetros dejados atrás, esa íntima soledad/refugio de las carreteras.

«Somos viajeros de árboles oscuros, estrellas de olor a azahar. Como un cansancio de tierra mojada, la noche se va a disipar», canta Alberto Montero en el estribillo. Hoy hemos hecho balance electoral en IU Andalucía y mañana repetiremos en el ámbito provincial; los balances tienen mucho de estribillo, máxime cuando Pedro Sánchez nos ha dejado sin solución de continuidad. En los grupos de WhatsApp afloran bromas: «Guardad los bocadillos que sobraron el 28», «No reciclemos todavía los distintivos de interventores y apoderados»… y así. Habremos de mantener los pulsos en hora.

Y sin solución de continuidad, echamos la tarde en la Coordinadora de Marea Blanca y Organizaciones sociales, sindicales y políticas para hablar sobre la situación del acuerdo de la Mesa Sectorial de Sanidad, el inquietante Plan de Verano que nos espera y las próximas actuaciones/movilizaciones.

(Imagen de cabecera: Sala de reuniones del centro cívico Las Sirenas, en la Alameda de Sevilla).

Coordinador de Izquierda Unida Sevilla.