Crónica de las emociones de un concierto (2ª parte)

Sé que Jay-Jay Johanson es mayoritariamente desconocido como cantante, pero para mí, que huyo de cualquier símil del fenómeno fan (en la música, el cine, la literatura… y ya de la política o el fútbol ni hablamos), sus canciones son parte de la (perdón por la cursilería) banda sonora de mis últimos 20 años. Exactamente, desde que Tomás Fernando Flores puso en Siglo XXI los tres primeros temas de ‘Tattoo’, que escuché yendo al trabajo (en Viapol, aquel entonces) recorriendo a todo lo largo, lángidamente, la Avenida Ramón Carande.